El simple hecho de cambiar tu plato normal para las comidas por otro de una medida inferior (de postre), te permitirá ingerir un 22% menos de calorías de las habituales. Al día puedes dejar de ingresar en tu cuerpo unas 500 calorías.
Otra solución para ahorrar calorías sería el comer solo las palomitas de maíz cuando estas en casa, controlando los ingredientes que usas para hacerlas. Así puedes evitar el consumo de unas 900 calorías por bolsa.
De otra parte podemos seguir disfrutando del consumo de las pizzas, si sustituimos las que se combinan con bacon y queso por otras de verduras en las que la base sea una masa fina. Con ello evitas añadir 500 calorías a tu organismo.
Asimismo deja a un lado la ingestión de frutos secos ya que aunque son cardiosaludables, a su vez también son hipercalóricos. Por lo que su consumo te llevará a añadir muchas calorías no deseadas.
Y por último a ver que hacemos con las ensaladas, ya que muchas veces empezamos a poner demasiados ingredientes como queso, atún, bacon, aguacates, nueces, etc. que terminan por dejar un producto para el consumo alimenticio con un gran contenido calorífico.